La carrera de arquitectura tiene notables ventajas económicas, profesionales e incluso de reconocimiento por el increíble talento que requiere esta profesión. Sin embargo, también comparte con otros muchos estudios un entramado complejo y demasiado amplio como para limitarse a fijar la Universidad como única meta.
La arquitectura como estudio es una de las que más cursos, másteres y postgrados ofrece dado que gracias a estas especializaciones el profesional adquiere los conocimientos necesarios para realmente ofrecer un valor diferenciador respecto a la cuantiosa competencia existente.
Las decisiones sobre estos cursos especializados de arquitectura pueden responder a muchos motivos, sin embargo hoy te proponemos una reflexión solidaria: Por qué es aconsejable especializarse en una vertiente de la arquitectura para conseguir ayudar a los demás.
En primer lugar está el valor del conocimiento. Muchos arquitectos son profesores o compaginan su profesión con la docencia. La especialización en uno o varios temas permite una mayor facilidad para compartir este conocimiento con otros potenciales profesionales de la arquitectura. Esta docencia se puede ofrecer tanto de forma activa (impartiendo clases) como lectiva (con libros o tesis doctorales). Un ejemplo actual de esta labor de compartir conocimiento especializado lo representa Alberto Sanjurjo Álvarez, el profesor y arquitecto a un mismo tiempo quien, además del amplio reconocimiento recibido por sus trabajos dentro y fuera de España, también ha publicado una tesis doctoral sobre la complejidad e importancia de las escaleras de caracol en concreto y arquitectura en general.
Otra de las funciones de un arquitecto especializado que sirve para ayudar a los demás es la de ofrecer una vivienda no sólo digna, sino también atractiva. La diferencia entre una casa y un hogar a menudo depende del talento aplicado del arquitecto encargado de la edificación. Su creatividad, su funcionalidad aplicada y el estilo impregnado en su estructura servirá para diferenciar un bloque de viviendas de una atractiva urbanización de residentes felices de vivir en un lugar en sintonía con sus deseos y necesidades.
Al talento relacionado con la vivienda urbana le acompaña sin duda la especialización en infraestructuras de comunicaciones. Los puentes, pasos elevados o diseños de entrada y salida a una ciudad requieren de cierta especialización por parte del arquitecto, que sólo adquirirá mediante los cursos preparados para ello y que le permitirán otorgar cierta personalidad a una ciudad.
A estas infraestructuras se le suma la creciente proliferación de cursos de diseño de interiores, que cada vez demuestra mayor relación con la arquitectura, hasta el punto de que muchas veces se fusionan sirviendo esta última a un diseño de interiores creativo, funcional y sorprendente.