La prestación de servicios como el de la construcción de casas constituye una labor que favorece el empleo de distintos tipos de trabajadores, como es el caso de quienes hicieron un curso tecnico albañil.
El albañil es la base para integrar casas, conjuntos habitacionales, centros comerciales, complejos industriales, entre muchas otras construcciones arquitectónicas y de ingeniería.
Algunas de las labores que desarrolla el albañil se encuentran relacionadas con la excavación de bancos de arena o tierra, el entablado de la cimbra y el andamiaje, con la elaboración de la “mezcla”; el pegado de ladrillo, loseta y piedra; y con la nivelación y revestimiento de superficies.
Una actividad elemental del albañil es el trazado de ejes sobre el terreno, conforme a los planos de construcción, para marcar la colocación de cimientos y tabiques. Para realizar este trabajo, emplea herramientas como el flexómetro, hilo, nivel de manguera, plomada, etc.
El Albañil aplica su facultad numérica y espacial cuando mide las distancias entre los puntos del terreno. Asimismo, usa esa habilidad al determinar las dimensiones de las superficies a revestir con la mezcla y otros elementos, o cuando tiene que comprar insumos necesarios en la obra.
Puede laborar por su cuenta y/o realizarlo mediante contratistas o de empresas dedicadas a la construcción. Hay otras tareas cuyos perfiles son parecidos al del albañil y pueden ser variantes de empleo para él, como por ejemplo Pastero, Mampostero, Mezclador, Acabador, Azulejero, etc.